domingo, 14 de septiembre de 2014



Ruta:
Día 1: Barcelona -  Logroño
Día 2: Logroño- Vitoria – Bilbao - Santander – Ferri
Día 3: Ferri – Portsmouth – Hotel Xanadu
Día 4: Hotel Xanadu - Ace Café London – Old Barn B&B
Día 5: Old Barn B&& - Jedburg – Rosslyn capel -  Edimburgo - Davaar House B&B
Día 6: Davaar House B&B – Stonehaven - Caimgorns National Park - Inverness - The 
White House B&B
Día 7: White House B&B - Urquhart Castle – Ness Lake - John O´Groats- Craggan Hotel
Día 8: Craggan Hotel – Ullapool – Isle Skye
Día 9: Skye isle
Día 10: Skye isle – Eilean Donan – Fort Williams – Glencoe - Oban - Inveraray - Glasgow
Día 11: Glasgow - Liverpool 







Dia 1
Barcelona – Logroño

Este año decidimos encontrarnos en el Café Alsur Lluria para la salida, teníamos mucho tiempo hablando de recorrer Escocia y por fin llegó el día en que comenzaba la nueva aventura, después de un buen desayuno y de la siempre emocionante despedida, partimos mas allá del mediodía hacia Logroño, donde haríamos nuestra primera noche de este tan esperado viaje. Recorrimos las transitadas calles de Barcelona hasta tomar la NII en dirección Lleida, la que a la postre seria nuestra primera parada a estirar y refrescarnos, la temperatura iba en aumento y en algunos tramos superó los 33 grados, no podías detenerte ni un segundo sin empezar a transpirar como loco, continuamos camino hasta la entrada de Zaragoza donde repostamos gasolina y bebimos algo, un par de horas mas tarde llegaríamos a Logroño. Recorrer grandes distancias por autopistas en la moto no es nada divertido y terminas agotado de mantener la misma posición durante tanto tiempo, esta primera etapa se hace larga y tediosa, solo te anima el deseo de llegar a los lugares prometidos.
En Logroño salimos de tapas por el centro histórico y nos deleitamos con su magnifica gastronomía y los reconocidos vinos de la rioja, las calles están llenas de pequeños bares, todos repletos con la gente de la ciudad, y cada uno anuncia con orgullo sus mejores tapas en las fachadas de los locales con unos pintorescos afiches, unas tapas mejores que las anteriores, tantas que no llegamos a probar ni un diezmo de lo apetecido y los precios son del siglo pasado pues la mayoría costaba solo 1,50€. Logroño es una ciudad pequeña pero muy bonita, sus calles y la Catedral son parte importante del camino a Santiago y no paran de cruzar los peregrinos con sus grandes morrales a la espalda. La estancia estuvo aderezada con el encuentro de unos viejos amigos que recorren España desde Toronto y a quienes no veía desde hace 19 años, mejor imposible!






Días 2 y 3
Logroño – Vitoria – Bilbao – Santander – Ferri

En España el desayuno no se toma según se entiende en el resto del mundo occidental, se suele tomar un café y alguna pasta a primera hora para luego comer algo más bien parecido a una cena al final de la mañana y completarlo con la comida y la siesta a las 2 de la tarde. Por supuesto este ritmo para un viaje en moto en el que conduces durante todo el día es incompatible, así que nos vemos forzados a cambiar la forma de alimentarnos durante estos días y dejar las “botifarra amb mongetes para cuando regresemos a casa, desayunamos en un local cerca del hotel que según los comentarios de Foursquare preparaban buen café y media hora mas tarde ya rodábamos hacia nuestra primera parada del día, Vitoria, donde nos sorprendió su hermosa catedral sobresaliendo sobre las copas de los arboles del parque que la bordea y sus calles empedradas en el centro de la ciudad, plazas cuidadas al detalle y muy bien conservadas con algunas pinceladas de modernidad como sus fuentes, esculturas, arreglos florales y su tranvía. también paramos a comer alguna cosa y terminamos en un bar de tapas fantástico, donde probamos la mejor tortilla de patatas según los jueces de un afamado concurso y otras tapas inolvidables. Incluso al tratar de aparcar las motos la guardia se nos acerco para recomendarnos donde, todo un detalle de la ciudad para con nosotros.
Al salir nos dirigimos a Bilbao solo para cruzarlo y tomarnos la foto de rigor frente a su orgulloso museo Guggenheim, el cual esperamos poder visitar al regreso de Escocia, continuamos camino a Santander ya con el tiempo contado para llegar a comer algo y subir al Ferri. Tampoco nos dio tiempo de visitar esta ciudad portuaria y solo recorrimos un par de calles y tomamos un menú mediocre para salir del paso hasta abordar nuestro esperado  transporte a UK.
La espera no fue muy larga y tras la sorprendente cantidad de motos que salían del buque luego de atracar entendimos porque era tan complicado conseguir cupo en estos ferris. Nuestro barco también estaba full a su ida y las 40 motos que colman la bodega inferior del buque estaban alineadas en el gran patio del muelle a la espera de la señal de un mozo para subir a bordo y tomar posesión de nuestros camarotes. El barco en general muy bien mantenido y con buen servicio, una forma muy cómoda de llegar a Portsmouth, sin embargo y como era de esperar la comida bastante cara aunque con 3 alternativas se presta para todos, un pequeño supermercado, una fuente de soda y un restaurante de cubierto te permiten escoger para las  3 o 4 comidas que deberás hacer antes de desembarcar en tierras Inglesas. A nuestra llegada a la aduana nos preguntaron como era eso que un Venezolano y un Griego viajaran juntos, y fue buena escusa para revisar todo cuanto llevamos y hacernos perder la oportunidad de cenar en los muelles de Portsmouth que tanto nos llamaron la atención cuando le pasamos a poca distancia con el barco. Otra cosa mas para tratar de hacer al regreso…
Dormimos en Londres después de conducir por primera vez al lado contrario durante una hora y sin ningún incidente que lamentar y no sin antes salir a dar una pequeña vuelta por sus lugares mas emblemáticos, Londres es una ciudad impresionante y mientras paseamos por sus calles parece que además también tiene buen tiempo...



Día 4
Londres – Ace Café London - Old Stone B&B

Visitamos un par de cafeterías y desayunamos en Electric cafe & CO con un excelente café de especialidad, un suave toque acido y mucho aroma a nueces le daban un sabor muy diferente al usual, esta zona de Londres, el barrio de Ealing, tiene mucho carácter y esta llena de pequeños negocios especializados y hermosas cafeterías donde sentarse y relajarse un rato.
Luego de cambiar algunos € seguimos camino hacia el conocido Ace-Cafe-London, un pedacito de historia en el motociclismo desde los años 1940 y donde con posterioridad se originan las cafe-racer en la década de
los 60, en la actualidad se ha convertido en un centro para las concentraciones de motos en Londres. Tras comer y beber alguna cosa seguimos camino con la intensión de acercarnos lo mas posible a Edimburgo, tomamos la M1 hacia el norte y luego de varias paradas a repostar, comer algo y estirar las piernas sobre las estaciones de servicio a lo largo de las autopistas aun estábamos por Newcastle, en general todas las vías tienen un trafico  impresionante y las autopistas las están modificando y actualizando por lo que reducen aún más el ya bastante bajo limite de velocidad durante largos tramos, así que ya cansados y con la puesta de sol, mientras comíamos unas hamburguesas en una de las paradas, reservamos una habitación en el Old-Stone Bed & Breakfast a una hora sobre la A1 tras dejar Newcastle, el lugar es sencillo pero hermoso y con todos los detalles muy cuidados  y la atención de su propietaria fue perfecta.
Este fue un día largo de mucha autopista, ya comenzamos a acostumbrarnos a pasar el día entero sobre la moto pero con el deseo de llegar a los maravillosos parajes y las carreteras de ensueño que nos promete Escocia es fácil mantener el entusiasmo, supongo que al regreso será un poco mas duro… ya les contaré.







Día 5
Old Stone B&B – Bamburg Castell – Jegburg Abby – Rosslyn Chapel - Edimburgo - The Old Barn B&B


Amanecimos con el desayuno servido en la mesa, con un magnifico desayuno Ingles porque aun no habíamos cruzado la frontera de Escocia, y tras devorarlo recogimos el equipaje y salimos a la carretera, el día ya no seria de largos trechos por autopistas, al contrario, solo haríamos pequeñas carreteras rurales a través de la campiña inglesa hasta llegar a la frontera con Escocia y celebrar el clásico anuncio de bienvenida colgado de un poste a la orilla del camino con una gran sonrisa debajo del casco.
A pocos kilómetros del hostal, al volver a la carretera, estaba la costa y un primer pueblo pesquero a orillas del Océano, el penetrante olor a moluscos y algas no se hizo esperar, en sus muelles descansaban las nasas con sus mallas recrecidas hasta casi convertirse en paredes de todo el tiempo esperado bajo el agua tratando de atrapar
cangrejos y langostas, mientras los pequeños barcos de pesca yacían sobre el lecho fangoso del puerto a la espera de la marea alta para volver a la vida. Recorrimos una larga playa con sus dunas cubiertas de un pasto alto para encontrar al final del camino el hermoso castillo de Bamburg y tras una corta parada continuamos camino hacia la abadía de Jedburg, ahora si por pequeñas carreteras, con la esperanza de apartarnos del intenso trafico que hasta entonces nos había acompañado y disfrutar de las vistas de la campiña conduciendo nuestras motos, pero pronto nos dimos cuenta que no seria así, al contrario, el trafico seguía siendo intenso y complicado, las carreteras en esta zona de Inglaterra están ocupadas esencialmente por dos tipos de
conductores y no sabría decir cual es peor, los abuelitos que van muy despacio y con trayectorias erráticas o trabajadores con furgonetas o pequeños camiones a toda velocidad y ocupando la totalidad de la vía,  y así pronto cambiamos la estrategia y tomamos carreteras amplias y con trafico, pero mucho mas seguras hasta que unas ruinas fantásticas e impresionantes sobresalieron en el horizonte. Solo le quedan en pie las paredes y arcos de las ventanas coronando la bella colina sobre la que discurre
un pintoresco pueblo que parece vivir del turismo generado por la Abadía de Jedburg, nos sentamos con esa hermosa vista a disfrutar de un plato de sopa y un buen trozo de pan en una linda terraza. Al salir de Jedburg nos dirigimos a visitar la capilla de Rosslyn en las afueras de Edimburgo, que después de restaurada con mucho detalle y tras el salto en popularidad
que le brinda Dan Brown al concluir la novela El Código de Da Vinci en ella, a multiplicado sus visitantes por 10 y ahora acomoda un museo con guías, tienda de suvenir  y hasta cafetería!. Rosslyn Chapel es un lugar  hermoso con mucha historia y unas tallas impresionantes que resultaron ser solo un abreboca de la fascinación de este pueblo por las grandiosas construcciones en piedra, lo que al llegar a Edimburgo confirmas al voltear la mirada en cualquier dirección, la ciudad esta repleta de bellos edificios con tallas increíbles en sus paredes y techos. 

Caminamos solo unas horas sobre la parte mas comercial de la ciudad, escuchamos su música de calle y probamos su comida mas vanguardista, nos quedó mucho por ver y las ganas de volver a visitarla con calma. Salimos con prisas para llegar al B&B antes de las 21:00 y al llegar nos recibió una pareja mayor encantadora que nos abrió las puertas de su antigua casa y nos atendió con mucho esmero.



Día 6
The Old Barn B&B - Dundee - Stonehaven - Caimgorns National Park - Inverness - White House B&B

Como ya comienza a ser costumbre en los B&B pedimos el desayuno a las 8:00 y tan pronto te presentas en el comedor te  sirven el clásico Coked Breakfast y una selección de cereales y frutas, una forma fantástica de iniciar el día. Al terminar de comer y tras satisfacer la curiosidad de los presentes sobre nuestro viaje empacamos y salimos con dirección a Dundee, las carreteras aun siguen muy congestionadas en esta parte del viaje por lo que preferimos seguir avanzando por las modestas autopistas hasta llegar al puente largo y hermoso que cruza el rio Tay en su desembocadura al mar del norte y nos deja en la entrada de la ciudad de Dundee, con una zona industrial bastante grande y un centro histórico bonito, calles amplias empedradas y buenas cafeterías, caminamos hasta encontrar un buen café donde nos sentamos en cómodos sofás a disfrutar de nuestras bebidas y algún dulce.
Luego del descanso visitamos Stonehaven, con su pequeño puerto pesquero donde almorzamos tras una ventana con vistas fantásticas después de haber caminado por su plaza mayor y por el malecón para luego pasear por las ruinas de Dunnottar Castle. Cuando pisas lugares como este realizas lo antiguas que pueden ser las luchas entre algunos pueblos que desde hace mas de 7 siglos tratan de dominarse unos a otros, la ciudad de Dundee fue arrasada 3 veces pero ya no ves
sus cicatrices, solo las supones al ver en las noticias la discusiones sobre el referéndum de independencia, pero en estos castillos si que las ves, de hecho, ellos mismos certifican estas batallas que se libran por muchas generaciones.
Atravesamos el parque Caimgorns que nos brindo finalmente las carreteras que nos encantan, de esas con muchas curvas y poco tráfico y con unos paisajes
impresionantes de las Highlands para culminar el día en Inverness, capital de este hermoso territorio. Inverness fue una grata sorpresa desde el principio, su hermoso castillo, el rio Ness con sus bellos puentes en el centro de la ciudad y sus edificios y calles de piedra brindan una magnifica vista, y todo esto aderezado, por casualidad, con el encuentro con los moteros de la asociación de Inverness, quienes apenas nos vieron acercarnos nos hicieron señas para que aparcáramos las motos en los previos de su local y nos brindaron un buen Latte en su terraza con una amena conversación, donde por supuesto no falto el tema de la independencia de Escocia y las emociones afloraron sin importar las razones.




Caminamos por sus pequeñas calles, cruzamos el puente colgante peatonal y al terminar de comer algo salimos por un magnifico puente que atraviesa el fiordo de Moray para llegar al B&B, que también resulto ser de unos moteros.








Día 7
White House B&B - Urquhart Castle – Ness Lake - John O´Groats- Craggan Hotel

Coked breakfast a las 8 en punto y salimos hacia el lago Ness, las carreteras son cada vez mas hermosas aunque aun continúan siendo muy transitadas, atravesamos un pequeño pueblo a las orillas del lago, Lewiston, totalmente decorado en honor a Nessy el monstro del lago Ness que ahora es adorable y de llamativos colores, unos pocos kilómetros y llegamos al Castillo Urquhart. El estilo Disney se va expandiendo a todas partes, pagas la entrada y llegas a un hall que atraviesa la tienda de recuerdos, luego la cafetería y su bella terraza  con vistas al Castillo y al lago de fondo,  unas vistas impresionantes que no hacen referencia alguna a lo dura que fue la vida de la mayoría de las personas que lo habitaron. 
Desde aquí recorrimos la costa Este hasta su punto mas al norte, John O´Groats, con una parada a comer en las orillas del fiordo Cromarty y tras cruzar la ciudad de Wick llegamos a Duncansby Head, el faro mas al Norte de UK por ahora como dirían algunos Escoceses a la espera de su referéndum. La costa en esta parte de las islas es muy abrupta, con farallones verticales de roca de varias decenas de metros de altura y coronados con un pasto verde muy corto, lo que les da un aspecto muy particular e impresionante.
Las carreteras se hacen cada vez mas angostas en esta parte de Escocia y ya comienzan a tener un solo carril con zonas de adelantamiento cada 100mts mas o menos, aquí te puedes apartar mientras esperas que el trafico contrario pase y te permita continuar tu viaje. Son carreteras con vistas hermosas sobre la costa y los fiordos que poco a poco te vas encontrando a lo largo de toda la geografía, la altura de las colinas y valles no es mucha y en general son como suaves ondulaciones en esta parte norte, en algunos trechos me recordaba la Gran Sabana, en el amazonas de Venezuela, con sus pastos cortos y grandes extensiones abiertas donde se pierde la vista, con la gran diferencia del clima y la fauna. Todos los caminos están salpicados de puntos blancos, algunos con cachos, las ovejas y corderos que en no pocas ocasiones los encuentras en medio de la carretera y no se inmutan a tu paso, poco a poco nos vamos acostumbrando a su continua presencia hasta que terminamos manteniendo el ritmo de viaje y solo nos apartamos lo mas posible.

Ya llegado el atardecer y casi sin internet decidimos parar un poco antes de lo previsto para no rodar con poca luz. En estos viajes pierde todo el sentido avanzar de noche puesto que no ves  los hermosos paisajes, así que en lo posible lo evitamos, preferimos parar y continuar el día siguiente.  Encontramos un B&B en las afueras de Tongue donde nos prepararon la cena, hasta ahora el único con baño comunitario, pero aun así bastante bien, y la comida muy buena, nos prepararon un fantástico Chicken pot pie.


Día 8
Craggan Hotel – Ullapool – Isle Skye

Esta vez tampoco hubo diferencia con lo que ya es una rutina  en las mañanas durante el viaje, Coked Breakfast a las 8 para luego salir, no sin antes satisfacer la curiosidad sobre nuestro viaje a nuestros caseros por una noche. Retomamos el camino y los tramos de carreteras se alternan entre la costa y las colinas interiores,  todas las vistas nos dejan sin aliento, cada tramo es especial y no tardamos mucho en declarar la carretera como la mejor de nuestras vidas, la costa discurre a nuestra derecha con inmensos acantilados que cada vez son mas altos y esta cubierta por una suave bruma que le da un aspecto bucólico y que solo desaparecen cuando se abren paso los pequeños fiordos de esta parte de la isla donde suelen ubicarse los poblados, en ese momento el paisaje cambia abruptamente, la carretera baja a nivel del mar, regresa el olor a sal, algas y moluscos y  bordeas las orillas del fiordo y en algunos casos los atraviesas sobre pequeños puentes hasta subir de nuevo por curvas
pronunciadas sobre las suaves colinas del otro lado, a nuestra izquierda y de tonos grises por la suave bruma se ven a lo lejos algunas montañas que se convierten en mansas ondulaciones al acercarse a la costa, las ovejas campan a sus anchas sin ningún tipo de cercas,  y en contra a lo esperado las vallas demarcan los pequeños poblados para evitar que las ovejas dominen por sus pocas calles. Los pequeños pueblos se suceden uno tras otro y así cruzamos Lochside, Durness, Rhiconich, Scourie hasta llegar Kylesku ubicado en un fiordo mas grande y desde donde la carretera se desvía hacia el interior del territorio Eilean Mor por un largo tramo cruzando entre suaves colinas y lagos que parecen espejos para llegar al puerto de Ullapool, uno de los principales puntos de enlace con las islas mas occidentales de Escocia y donde paramos a comer y descansar un buen rato.
Las mareas en esta parte del mundo son impresionantes, crean vertiginosas corrientes entre los lagos y mares interiores y cambian tanto de nivel y en tan poco tiempo que para alguien nacido en el trópico resultan casi inexplicables por mas que entiendas las leyes físicas detrás de ellas. Las salidas de los fiordos al mar parecen enormes ríos y la dirección del flujo cambia en tan solo 6 horas,  los 3 metros de variación en el nivel del agua dejan los embarcaderos secos y sus barcos sobre el fondo fangoso en el transcurso de una buena conversación mientras degustas el clásico fish & Chips en algún buen local del puerto.
El tramo recorrido había sido largo y a pesar de llevar un buen ritmo todavía nos quedaba un buen trecho hasta llegar al objetivo de hoy, Skye isle. Al salir de Ullapool recorriendo el borde del Loch Broom por la carretera principal que comunica este puerto importante  con Inverness, la capital, aumentamos la velocidad y comenzamos a adentrarnos de nuevo en los territorios de las Highlands donde no vuelves a encontrar mas pueblos, solo algunas casas dispersas generalmente al borde de algún lago interno de los que si abundan por doquier, tantos que perdimos la cuenta, detrás de cada colina aparecía un nuevo lago reflejando el cielo y las montañas y así hasta llegar a una pequeña desviación en la carretera hacia nuestro destino de este día. La velocidad se redujo en proporción al ancho de la nueva carretera pero los paisajes seguían intactos, aun mejores porque los podías disfrutar mucho mas y después de innumerables lagos, algunos represados para aprovechar su energía, bajamos  a la costa del Loch Carron que luego se abriría para convertirse en el Inner Sound donde desembocan multitud de fiordos y que en su parte mas angosta atraviesa un bellísimo puente curvo para comunicar de forma permanente la isla de Skye.

Conseguir hotel en Skye no fue tan fácil como esperábamos, la mala señal de teléfono con conexión de pena a internet nos obligo a tocar la puerta de algún B&B que decía estar completo como casi todos los que te cruzabas por el camino, sin embargo la suerte nos sonrió y la propietaria nos recomendó el de su amiga que estaba muy cerca y resulto magnifico, con vistas impresionantes de la bahía, buen precio y mejor atención, quedamos encantados y decidimos pasar allí 2 noches para poder recorrer la isla con calma todo el día siguiente…   



Día 9
Skye isle





Comenzamos el día a las 8:00 tras el desayuno y dejar algo de ropa a lavar en una pensión cercana, nos marchamos mas ligeros de lo habitual pues pensamos dormir aquí de nuevo esta noche, la mañana esta clara y fresca, el tiempo sigue respetándonos de una manera ya increíble pues tras 7 días conduciendo por la izquierda aun no nos llueve, Durante la mañana coincidimos con un guía turístico Español con el cual contrastamos la ruta del día y después de algunos ajustes en el GPS salimos a recorrerla.

La Isla de Skye es un lugar muy visitado y enseguida comienzas a recorrer sus carreteras lo notas, el trafico es relativamente intenso pero sus carreteras no están preparadas para ello, solo hay una carretera de dos vías, la A87, que recorre la isla hacia el Nor-Oeste desde el Skye Brigde, en Kyle, hasta Uig, el puerto mas occidental, el resto de los caminos son de un solo carril con espacios para adelantar el trafico en sentido contrario. Salimos por ella recorriendo primero la bahía de Broadford, los aromas del campo y de las marismas se mezclan con los de las destilerías que por esta parte de Escocia son muy frecuentes, luego los hermosos lagos o fiordos que bordean esta parte de la isla hasta llegar al Loch Portree que alberga una bella y colorida ciudad con su mismo nombre donde paramos a tomar un buen café y un scone con mermelada en su bella plaza central. La mayoría de sus casas son blancas pero en su puerto son de vivos colores y se reflejan en sus quietas aguas creando un magnifico paisaje.  Continuamos camino hasta el Loch Mealt donde paramos a ver sus magnificas cascadas y el risco que lo comunica al mar, las aves marinas anidan sobre todos los acantilados y sus graznidos son ensordecedores, al fondo apenas logras ver el océano con la superficie toda manchada de blanco y estirada y deformada por las fuertes corrientes que generan las mareas. 
Al continuar nuestro camino cruzamos el pueblo de Staffin y a los pocos kilómetros dejamos la carretera desviándonos hacia el interior por una pequeña salida que nos llevaría directamente a Uig atravesando las colinas que nos separaban de la otra parte de la isla. Una carretera hermosa, con suaves ondulaciones y cerradas curvas que ascendían hasta lo alto del puerto por una cara bastante empinada de la montaña dejando unas vistas impresionantes a ambos lados de la cumbre, para luego descender de forma mucho mas suave por unos valles altos preciosos hasta llegar al puerto de Uig, un pequeño poblado de apenas 200 hab y el puerto mas cercano a las islas Lewis y Harris.

Visitamos el castillo de Dunvegan convertido ahora en un museo con una muestra interesante de la historia de los clanes Escoceses y terminamos en Neist Point con su famoso Faro, el mas occidental de la isla, ubicado sobre enormes acantilados tallados por las olas con su inagotable tozudez que nos recuerdan como la perseverancia es capaz de cambiar casi cualquier situación. Recuerdos de infancia cuando mi padre me preguntaba que era mas fuerte, la roca donde la ola se rompe en minúsculas gotas o la ola que a lo largo de los siglos convierte la dura roca en arena.

Volvimos con calma y disfrutando de los exuberantes paisajes a la comodidad de nuestro B&B para descansar tranquilos una noche mas en Escocia.

10 comentarios:

  1. Que envidia de viaje y que maravilla de fotos, un abrazo amigos....!!!

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    1. Gracias Pep, cada año lo organizamos un poco mejor y la experiencia nos va ayudando.

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  2. Genial!!! a la espera del resto.
    Yo quiero ir!!!

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  3. Impresionante viaje y muy bien narrado.las fotos preciosas.yo esté año lo quiero hacer en Agosto.un saludo

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    1. Espero que lo disfrutes mucho y que el tiempo sea benigno con ustedes! Es un lugar precioso para visitar.

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